El problema, tal como lo veo yo al menos, es cambiar la mentalidad tanto de profesores como de estudiantes. ¿Cómo? Los VLE o LMS (BlackBoard, WebCT, etc.) remedan aulas (grupo/clase en una asignatura) más reprografía más tablón de anuncios más algunas funciones de secretaría.
La Internet nos permite construir entornos más ambiciosos que un aula virtual. Por ejemplo, una comunidad de aprendizaje en la que puedan participar agentes antes ajenos (otros profesores y alumnos de la misma universidad o de otras, expertos, etc. ¿o cualquiera?). Pero el paso del grupo/clase autosuficiente a una comunidad global de aprendizaje requiere cambios de mentalidad y de prácticas muy radicales en profesores y estudiantes. Por ejemplo, una redefinición a fondo de roles y expectivas (profesor como proveedor único de conocimientos legítimos y estudiante como recipiente de conocimientos), pasar de una evaluación meramente sumativa a una más formativa, de la propia actividad de los participantes, etc. Algo difícil con grandes números, seguramente.
Honradamente: no creo que ni profesores ni estudiantes estemos preparados para tantos cambios. Sobre todo en una universidad en la que muchos de los primeros no van a enseñar sino a ganarse el sueldo y muchos de los segundos no van a aprender, solo a conseguir un título como sea (muchos, sí, muchos, demasiados). No creo que sin verdadera pasión por aprender tanto en profesores como en estudiantes funcione una comunidad de ese estilo.
En otro orden de cosas, un aula virtual podría ser una parte de una comunidad de aprendizaje en la que hubiera actividades "públicas" y "privadas" y grupos de usuarios con distintos niveles de acceso a la información (por ejemplo, a la personal). Un campus podría concebirse como un conjunto de comunidades de aprendizaje interconectadas entre sí en función de intereses y afinidades pedagógicas y de con tenidos y unidas al mundo a través de la Internet. Herramienta-concepto: Un Moodle, con herramientas Fle3 dentro de un Drupal :-D Tal vez en el futuro dotLRN llegue a algo parecido.
Un aspecto central a los modelos actuales de enseñanza online, la gestión de contenidos y toda la preocupación por la reusabilidad y su estandarización (objetos de aprendizaje, SCORM, etc.), pasa a segundo plano en un modelo básicamente comunicativo y no "contenido-céntrico". La construcción de significados y el aprendizaje es una actividad básicamente social y dialógica. ¿Cuál es la diferencia entre leer un libro que ha llegado por correo ordinario o vía Internet? A cambio, los modelos centrados en la comunicación son intensivos en trabajo humano y no escalan bien: no son rentables.
La nueva generación de LMS-LCMS (Learning Management Systems- Learning Content Management Systems), como por ejemplo Desire2Learn, van por una vía intermedia: portal configurable, soporte a grupos, comunidades, pero también gestión de contenidos "dura" y módulos de pruebas objetivas. Todo ello integrado con el ERP corporativo. ¿Dónde está la pedagogía? Aprender parece que es un problema del estudiante.
[Continuará...]